La calvicie o alopecia es un problema común en hombres y mujeres. Aunque hay varias causas potenciales, la causa más común es la alopecia androgenética, también conocida como pérdida de cabello hereditaria. Esta forma de calvicie es causada por una combinación de factores genéticos y hormonales. Los hombres que tienen una historia familiar de calvicie tienen un riesgo mayor de desarrollar alopecia androgenética.
La alopecia androgenética se debe a la sensibilidad de los folículos pilosos del cuero cabelludo a la hormona dihidrotestosterona (DHT). La DHT es una forma activa de la testosterona, y a medida que los hombres envejecen, pueden tener niveles más altos de DHT en el cuero cabelludo. La DHT provoca una miniaturización de los folículos pilosos, lo que reduce la capacidad de los folículos para producir cabello nuevo. Con el tiempo, los folículos pueden desaparecer completamente, lo que resulta en la pérdida de cabello.
Otras causas de calvicie en hombres incluyen:
- Estrés: El estrés puede desencadenar una forma temporal de calvicie conocida como alopecia telógena, en la que los folículos pilosos entran en una fase de reposo temporal y dejan de producir cabello nuevo.
- Deficiencias nutricionales: La falta de vitaminas y minerales esenciales, especialmente hierro, zinc y vitamina D, puede contribuir a la pérdida de cabello.
- Trastornos médicos: La calvicie puede ser un síntoma de un trastorno médico subyacente, como la tiroides, la diabetes o un trastorno autoinmune.
- Medicamentos: Ciertos medicamentos, como los que se usan para tratar la presión arterial alta, el acné y la depresión, pueden causar pérdida de cabello.
- Cambios hormonales en mujeres: Los cambios hormonales, como los que se producen después de un embarazo o durante la menopausia, pueden causar pérdida de cabello.
Es importante mencionar que existen diferentes formas y grados de calvicie, y es importante consultar con un especialista para poder determinar la causa específica y establecer un tratamiento adecuado para cada caso particular.